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NUNCA MAS.

  • Foto del escritor: Lucas Agustin
    Lucas Agustin
  • 24 mar 2019
  • 4 Min. de lectura

Actualizado: 25 ago 2019

El 24 de Marzo de 1976 quedara escrito como uno de los días mas negros y nefastos de la historia argentina. Ya han pasado 43 años desde ese dia y la herida sigue doliendo y sangrando como la primera vez.



El contexto socio-económico que vivía Argentina era complicado, una presidenta endeble como Maria Estela Martinez de Peron, se tambaleaba constantemente y se sumergía en un sin fin de malas decisiones políticas y una economía inestable, esto sumado a la muerte de su esposo, Juan Domingo Peron, máximo exponente del movimiento popular denominado Peronismo dieron lugar a un Golpe de Estado que tuvo sus antecedentes en el marco de la doctrina nacional de la Guerra Fría, difundida por los Estados Unidos. En esa etapa, Argentina era el único país del Cono Sur que no había vivido un golpe de Estado contra un gobierno democrático. Esta intervención militar, se hizo llamar “Proceso de Reorganización Nacional”. Los integrantes de la Junta Militar recibieron entrenamiento durante 12 meses en la famosa Escuela de las Américas, ubicada en Panamá y financiada y dirigida por los Estados Unidos. El Golpe de Estado concordó con las dictaduras llevadas a cabo en Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay, además de contar con la complicidad del gobierno de Norteamérica y de la Iglesia Católica. Unas horas antes de dar inicio al golpe, en la madrugada del 24 de Marzo de 1976 Maria Estela Martinez de Peron fue detenida, y el general Jorge Rafael Videla asumiría las riendas del país bajo el papel de presidente de la nación, el 29 de Marzo del mismo año. Su primer mandato fue interrumpir las funciones del máximo órgano legislativo, El Congreso Nacional, prohibir los partidos politicos y destituir a todos los miembros de la Corte Suprema de Justicia, máximo órgano judicial. Al mismo tiempo hubo una fuerte intervención en los sindicatos, que hasta el momento cumplían un rol fundamental en la política argentina y en la protección del sector trabajador. Si bien Argentina había sufrido con anterioridad diversos Golpes de Estado [ 1930, 1943, 1955, 1962, 1966], ninguno de ellos utilizo los mecanismos que ejercidos por la dictadura de 1976, donde el Estado haciendo uso del monopolio de la fuerza, del aparato represivo y de una arbitrariedad judicial, cometería las peores violaciones de Derechos Humanos conocidas, las mismas iban desde quema de libros con ideologías contrarias a la junta militar, secuestros clandestinos, torturas, aislamientos ilegales, desapariciones forzadas, sustracción de bebes, simulacros de fusilamiento hasta asesinatos.



Quienes sufrieron estas atrocidades fueron decenas de miles de personas que cayeron bajo el plan de exterminio del gobierno militar, de las cuales muchas jamas fueron encontradas y hasta el dia de hoy son buscadas por los diferentes organismos de Derechos Humanos como las emblemáticas Madres de Plaza de Mayo y Abuelas de Plaza de Mayo entre otros. Debido a que el grupo militar actuaba desde la clandestinidad a la hora de violar sistemáticamente los derechos y garantías, nunca se llevo registro de los secuestros y asesinatos, y solo se contaba con la información aportada por los familiares de las victimas quienes muchas veces eran desacreditados y desestimados por las autoridades policiales y judiciales. Por este motivo el numero de desaparecidos no ha sido establecido, los diferentes organismos de DD.HH. y la sociedad argentina en su totalidad los estima en 30.000 desaparecido que se han convertido en la cara de la lucha contra el terrorismo de estado, el imperialismo y la violación sistemática de los derechos humanos.

Este terrible Golpe de Estado, no hubiese sido posible sin la colaboración de grupo civiles, empresariales y sobre todo el amparo y apoyo de La Iglesia Católica, que jugo un rol fundamental en la llegada al poder de Jorge Rafael Videla, Emilio Eduardo Masera y Orlando Ramon Agosti, la cúpula militar a cargo, en las propias palabras de Videla: " La Iglesia no era adicta a nosotros; teníamos nuestros encontronazos, pero, como institución, se manejaba con prudencia: decía lo que tenía que decir sin crearnos situaciones insostenibles. En ese contexto, la relación fue muy buena".



Este dia debe servirle a la sociedad argentina para recordar estos acontecimientos y no volver a repetir los mismos errores para que nunca mas suceda algo similar, donde las fuerzas armadas asiendo uso de la violencia tomen el control de la vida de mas de 44 millones de argentinos. Son incontable el numero de historias de madres y abuelas que lucharon contra el terrorismo de estado en forma pacifica, enfrentando al aparato represor en soledad absoluta, con la única finalidad de encontrar y recuperar a sus hijos y nietos.

En honor a todas ellas recordamos a Maria Isabel Chorobik de Mariani, alias "Chichi", una activista de los Derechos Humanos en Argentina, fue fundadora y segunda presidenta de La Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y fundadora de la Asociación Anahi, en honor a su nieta desaparecida, Clara Anahi Mariani. Durante la dictadura cívico-militar, las fuerzas militares atacaron la casa de su hijo Daniel Mariani y su nuera Diana Teruggi, ambos militantes politicos, quienes tenían una hija de tres meses, Clara Anahi. En el ataque murió su nuera y fue secuestrada la bebe. Al año siguiente asesinaron a su hijo. Chichi lucho hasta el ultimo dia de su vida por la recuperación de su nieta, en el momento de su secuestro la misma Iglesia Católica le dijo que la pequeña había sido entregada a una familia influyente y que no revelaría su paradero. El 20 de Agosto de 2018 Chichi fallecido, pero no su legado y el de 30.000 madres, abuelas, hijos, nietos, amigos, vecinos que gritan al unisono ¡NUNCA MAS!, ¡MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA! ¡30.000 COMPAÑEROS DESAPARECIDOS, PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE!.



 
 
 

1件のコメント


dariosgarzini
2019年5月01日

Excelente análisis, resumido en unos pocos, pero suficientes párrafos. Un hecho que hay que recordar todos los días, mas allá de las fechas conmemorativas. Teniendo presente, tal como se detalla, cada uno de sus actores: aquellos cómplices de siempre (iglesia, medios de comunicación, empresarios) y la madres y abuelas de plaza de mayo con su incansable y admirable lucha. A diferencia de otros países, en Argentina se ha hecho algo de justicia y muchos de estos genocidas han sido juzgados y condenados, quedan otros tantos... NUNCA MAS!!

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